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José Mari Lumbreras (Tudela, 1961),
casado, dos hijos, habría tomado otros
derroteros. El caso es que aquella directiva
abrió de par en par la puerta de
Osasuna al joven de 18 años quien, además,
en su primera temporada completa
logró el celebrado ascenso de Murcia.
Desde su debut en Primera contra Las
Palmas hasta su retirada a los 35 años vistiendo
la camiseta de la Real Sociedad,
más de 400 partidos le colocan en el primer
puesto del ranking, entre los jugadores
osasunistas, con más partidos de
Liga en Primera División. "Ahora con esto
de las rotaciones no se si hubiera llegado
a esas cifras", bromea Lumbreras al otro
lado del teléfono desde Tudela.
Retirado hace una década regenta
junto a Juan Pérez, cuñado y ex portero
de Las Palmas y Logroñés, una tienda
de la cadena Intersport en la capital de
la Mejana. "Gestiono un poco de todo.
Desde las compras, pasando por el almacén
hasta la venta directa. Lo malo
es que al ser negocio propio metes muchas
más horas que si trabajaras por
cuenta ajena", reconoce. "No, no me
costó adaptarme a la vida de ex futbolista.
Montamos el negocio en el año
1990 y ya tenía previsto dedicarme a
ella en el momento de la retirada. No es
lo mismo que si dejas el fútbol sin tener
nada que hacer después. En ese caso,
la retirada se puede hacer un poco más
dura", asegura. Lumbreras colgó las botas
en la Real en 1995 y regresó a su casa.
Seguramente por ser quien era, el
Tudelano no tardó en reclamar sus servicios.
"Me pidieron que les echara una
mano. No había querido sacarme el título
de entrenador nacional pero como
tenía el de juveniles y regional me ofrecieron
la oportunidad de llevar a los juveniles
y poco a poco me fui enganchando.
Estuve dos años con los
chavales y cuatro en Tercera. Había dificultades
en el club pero estuve muy a
gusto. Luego decidí dejarlo cuando mi
hijo entró a jugar en el equipo. No me
parecía ético seguir allí". Desde ese instante
Lumbreras pasó a ser un aficionado
más. No tanto de acudir a los campos,
"hace muchos años que no acudo
a Anoeta o El Sadar (sic)", como de
sentarse en casa frente al televisor. "Me
dolió en el alma lo que le pasó a Osasuna
en la Champions. Era una gran
oportunidad para los chavales que habían
firmado una campaña sensacional
y habrían gozado de una oportunidad
grandiosa de jugar con los mejores
equipos del mundo. Será difícil que
vuelva a repetirse algo así". Si algo llamó
la atención de Lumbreras es que el
Reyno de Navarra no estuviera abarrotado
en esa eliminatoria. "Cuando yo
jugaba (principios de los ochenta) cada
domingo el campo estaba a reventar.
Había una ilusión tremenda en la afición
una gran identidad con el equipo.
Mucha gente de la Ribera subía para
ver los partidos y el estadio entero los
vivía con verdadera pasión".
Lumbreras que en el vestuario rojillo
era conocido con el apodo de el ‘topo’,
"por lo que rascaba el césped", matiza,
se marchó de Osasuna con 26 años, "no
tuve ningún problema con nadie, simplemente
pensé que era hora de emprender
una aventura con nuevos retos deportivos
en el Zaragoza donde estuve dos
años. Después me llegó una buena oferta
de la Real y me fui para San Sebastián
donde prolongué siete años mi estancia".
Confiesa Lumbreras que los dos
equipos, el rojillo y el txuri urdin, ocupan
su corazón. "Es difícil decantarme por
uno. Pertenezco a los veteranos de los
dos. Por proximidad, porque soy navarro
y vivo en Navarra me tira más Osasuna.
Lo sigo más de cerca". En este sentido
no tiene reparos en ensalzar la política
del club. "Me parece un club muy bien
estructurado tras haber pasado unos
años muy malos. Ahora el presidente
(Pachi Izco) tiene muy claro lo que quiere.
Nunca se ha metido allá donde no
puede llegar y esa política me parece excelente.
Luego hay un trabajo magnífico
de Martín González y Juanjo Lorenzo a
la hora de fichar". "Cuando hay una filosofía
–prosigue- muy definida de lo que
se quiere habrá años mejores o peores
pero esa estabilidad ayudará a salir adelante
en los malos momentos. Si el club
no está asentado la inestabilidad se
transmite sin querer a la plantilla y esto
arrastra los malos resultados, como le
está sucediendo a la Real".