A medias

27/08/2018 @Mariluzsanchez

El Real Zaragoza suma un punto en su visita a Reus

El pasado sábado el Real Zaragoza se desplazó hasta Reus para lo que pretendía ser un plácido fin de semana en la costa dorada. Pero fútbol es fútbol y no hay rival pequeño pese a que el Reus lo demostró.
 
En los aciertos y los desaciertos el partido fue del Real Zaragoza. Aciertos en la posesión y en la presión, desaciertos en la imprecisión y una punta de ataque roma. La propuesta de Idiákez que por circunstancias o convicción desplaza al nueve a un costado y deja huérfana el área en la mayoría de las ocasiones hizo inoperante el trabajo de Pombo, protagonista indiscutible hasta que dejó su hueco al recién llegado Álvaro Vázquez.
 
Y es que, al fin y al cabo, eso fue el partido para del sábado, un encuentro de recién llegados, los que vinieron y los que están en ello. Fue un partido deslucido en el que se volvió a evidenciar que Verdasca no es suficiente para la medular pero nadie supuso que lo fuera a ser. Esa posición tiene nombre y apellido, el de Íñigo Eguaras, y el luso simplemente le cubre las espaldas al compañero. De buenos compañeros se llenó también el ataque zaragocista, los que intentan que Gual y Vázquez se integren y entiendan por dónde se mueve Jorge Pombo o la intención de pase de Buff.
 
El monólogo zaragocista dejó patente que este equipo está todavía a media cocción pero el vistazo desde el otro lado de la puerta del horno hace salivar. En la primera parte no se encontraron los tres palos aunque los minutos caían uno tras otro con la cámara fija sobre la portería de Edgar. A la reanudación, de nuevo el cansancio dejó hueco para algunos sustos de los rojinegros pero nada que hiciese tambalearse la estrategia maña.
 
Quizás algo de lentitud en los cambios hicieron que los nueve minutos que estuvo Soro sobre el verde no fueran suficientes para mejorar el marcador. El joven ejeano es puro fútbol, uno de esos regalos que ofrece la cantera zaragocista muy de vez en cuando, técnica e inteligencia al servicio del león y hay que aprovecharlo, sin atosigarlo, pero aprovecharlo. Sus minutos cambiaron la perspectiva del juego y abrieron opciones que hasta entonces no se habían visto, aceleró el juego y abrió nuevos espacios para sus compañeros en el ataque. Desgraciadamente insuficiente, sugerentemente ilusionante.
 
Hay peros y quizás que se quedan en el aire y que todavía sería pronto para argumentarlos. En la verdad única de la segunda división que son los puntos la calculadora dice que sumamos uno más hacia el objetivo, dos menos en el contador de sensaciones que ni asciende ni desciende.

Recién estrenado el coche aun no sabes cómo va a reaccionar cuando metas quinta ni si tendrá agarre en las curvas. De momento circula con matrícula provisional y con mejoras en el motor pendientes de taller. Deseando que empiece a acelerar. 

*Foto: realzaragoza.es